Ser madre es intuitivo, solo por el hecho de ser mujer. Poder cargar un ser en el vientre más que un privilegio es un milagro, esa protección brindada en el vientre por capaz de piel y membrana, es un escudo divino. Cuando esa pequeña masa de carne se convierte en un movido y entusiasta ser hasta que rompe ese escudo para lograr ver luz, desde ese momento su protección seguirá siendo su madre aunque de diferente forma. Esta vez no estará protegido por un escudo más bien por una guerrera. Aunque para una madre entender que esa criatura ya no es parte de ella, si no parte del mundo suele ser una aseveración difícil.
Con esta pequeña explicación hemos de entender que ser padre no es intuitivo es adquirido. No es cargado dentro de sí, ni pateado su panza para recordarle estar ahí. No será su escudo en sus principios de desarrollo, solo lograra ser un apoyo. Solo expresando con suavidad y caricias que alguien más está esperando por él. De esta manera ser tan protector o hacer sentir una protección similar a una madre es trabajo arduo. Trabajo difícil para un ser que no fue creado para amamantar más bien para sustentar y educar.
Lo que hace una tarea más fácil para este y aun así muchos no la aplican. No son capaces de apoyar y en ocasiones ni tan siquiera mantener. Criar para algunos es una tarea de madre, por ende su propio ego machista no los deja criar. Traer una criatura al mundo es una decisión mutua, con diferencia que los upss, logran hacer crianzas mediocres. Un upss sin lugar a dudas es una irresponsabilidad que en ocasiones logra ser una gran bendición, pero en otras ocasiones continúa siendo una irresponsabilidad, cuando los padres no se ponen de acuerdo para una verdadera crianza. Y de esta manera es que logramos ver la inmensa cantidad de madres solteras y la baja en familias.
En el siglo 20, una madre soltera es algo que se ve a diario, un padre soltero poco común. Llegamos a la era de madres de todos los días y padres de fines de semana. Una era donde el plástico ha sustituido el papel moneda y es más eficiente cargar una tarjeta que un billete. Donde las madres son ATH (a toda hora) y los padres EPM (en pocos momentos) en donde los supuestos padres y madres terminan por ser personas desconocidas que no tienen el menor empeño en serlos y quizás lo que si quieran serlos no se los permitan, pues ellos no son sus padres. Donde la vida se ha convertido en un circo, donde la palabra familia no es una importante, pues establecer una no es prioridad. Donde todos ven las cosas como más les convenga ya sea el amor, la familia, la religión, educación entre otras. Todos ven las cosas como le sea más fácil, que la educación le compete a los maestros, que la religión es para personas sonsas que no les gusta la diversión y muchos de los que creen en Dios le dejan la cristiandad al cura o pastor. Que la familia es una mujer que cocine, un hombre que aporte dinero, corte la grama y tener hijos, que el amor tan solo es una palabra que inventaron, y de existir la utilizo como quiera y la realizo de la misma forma. Que me gustaría tener una buena familia sin sacrificarme, una buena educación para mis hijos de manos cruzadas, un excelente amor sin trabajarlo y una grandeza espiritual sin dejar de pecar.
Así vivimos a lo loco, sin valores sin pensar en el prójimo, sin educar, con una familia en decadencia y con una fortaleza espiritual nula. Que un sentimiento tan increíble como el amor, ha sido remplazado con otras cosas como la estabilidad. En estos tiempos para muchos es más factible las apariencias que el bienestar. Que suele ser mejor que digan tiene una familia estable, que una amorosa. Que los jefes de familia prefieren obtener dinero, que compartir con su familia, que el trabajo es más importante que el amor o el crecimiento espiritual.
Que se prefiere una relación donde pueda obtener algo a cambio y no necesariamente tiene que ser amor. Que es más conveniente tener el auto limpio, la ropa lavada, el trabajo realizado, el patio recortado y dinero en el bolsillo que compartir con los seres queridos. Que palabras tales como dependencia, conveniencia, estabilidad, dinero, costumbre se han hecho más fundamentales y hasta han llegado a remplazar las idóneas de una relación amor, tolerancia, respeto, dignidad, bondad y Dios. Que logra ser más atractivo dar un billete de $20.00 que una caricia. Que la rutina ha llegado para quedarse al punto de evitar una linda sorpresa. Que la costumbre ha calado de forma tú arriba y yo abajo que sacar tiempo para las caricias y llegar hacer el amor. Que el amor lo puedes dejar para luego, ahora hay cosas más importantes como cuadrar las cuentas o repartir tareas. Cuando no tenemos la certeza si mañana habrá tiempo.