Justo en el mar

Sentado a orillas de un amplio mar, lo suficientemente grande para pensar que la vida es extensa y que muchas cosas faltan por admirar. Que justo aquí las olas impactan la orilla dando un placer de alegría con el poder estar aquí. Y mi compañera no piensa lo mismo, ella logra pensar que este majar visual, se debería compartir. Tener a alguien a quien dedicarle un poema, canción o simplemente sujetar de la mano mientras camino en la incesante arena de este majestuoso mar. Huellas quedan impresas a orillas de la impresionante cantidad de agua que he de ver, y mi compañera intentando dejar las suyas impregnadas en esta brillante arena, teniendo la certeza de que no podrá. Que sus huellas están mas que impregnadas dentro de mi, que no tiene sentido pudiese imprimirlas encima de este inmenso papel de textura agradable a los pies. Es bueno estar contigo y he aprendido mas de lo que pensé podría, he convivido muchos días y has compartido mis mas íntimos secretos; en ocasiones te he querido conmigo sujetandote con fuerza y otras te he querido echar de mi interior, pero tu misma me has enseñado a comprender que las cosas no siempre son como deseamos y que existe un tiempo particular para todo. Gracias por estar conmigo querida soledad. 

1 comentario:

  1. Wow, hacía tiempo que no entraba. No había leído ese de la soledad y como debes estar seguro me encantó mucho. Describes a la perfección cómo nos sentimos algunos con relación a la soledad.

    ResponderEliminar